Son muchas las personas que por diferentes motivos se acercan a nuestro centro a buscar una actividad que les ayude a reducir sus molestias en la espalda. Aunque suene raro, en muchas ocasiones desaconsejamos las clases colectivas de pilates, - ¿Por qué lo hacemos? - , porque una clase colectiva de pilates no es siempre la mejor manera de empezar si llevas tiempo sin realizar ejercicio, o si el dolor que sientes no te permite mantener un nivel elevado de esfuerzo.

En estas ocasiones, nuestro consejo es empezar por una clase que te ayude a descubrir tu nivel físico, tu rango de movimientos libre de dolor, y que te motive para trabajar con una intensidad adecuada para ti. 

En una clase de espalda sana verás ejercicios que te sonarán de Pilates, de Yoga, de la rehabilitación clásica, de la gimnasia correctiva, de las técnicas de estiramientos ,y de alguna que otra disciplina más. El objetivo es realizar un trabajo global y equilibrado de la musculatura que participa en tu neutralidad postural.

También debes saber que este tipo de clases no suple a una visita previa a tu medico y/o fisioterapeuta.

Si ahora no sufres ningún dolor y quieres prevenirlos, esta clase también es para ti.